Llamé a mis amigas para pedirles apoyo pero ya era muy
tarde, me habían dejado sola en este problema.
Al día siguiente al llegar al instituto todo el mundo me
miraba y se reía. Quería irme a casa pero no podía, tenía que ser fuerte y
acabar las clases. Así que no me fui y me quede en el instituto.
A la hora de la comida me senté sola y una de mis ex–amigas me
tiró toda la comida por encima delante de todo el mundo. Me fui corriendo al
baño y allí me desahogué llorando. Pero mientras lloraba alguien había estado
allí y me había grabado. Cuando llegué a
casa después del peor día de mi vida entre en Facebook y estaba el video de mí
llorando en el baño, había comentarios como “Jajajajaja, ojalá hubiera estado
allí”.
Empezé a coger una depresión y mis padres me cambiaron de
colegio. Todo iba bien en el nuevo colegio, pero era demasiado caro así que mis
padres me volvieron a apuntar a mi antiguo instituto. Cuando mis padres me lo
anunciaron rompí a llorar delante suyo y me desmadre. Mi madre me tranquilizó y
me dijo que me fuera a dormir y que descansara. Mientras estaba en mi cama
pensé, seguro que nadie se acuerda, pero eso solo lo sabría al dia siguiente.
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